El glacis

Al mirar a ambos lados del camino de entrada, se puede ver que el fuerte está casi sumergido en la tierra. Se construyó así intencionadamente para protegerlo contra el creciente poder de las armas navales en el siglo XIX.

El fuerte está rodeado por una franja de tierra estéril y ligeramente inclinada que en la jerga militar se conoce como "glacis", pero para un simple soldado, era conocido simplemente como la "tierra donde se mata”. Servía como amortiguador defensivo alrededor de la fortaleza y exponía los movimientos del enemigo al atacar sin ofrecerle ningún refugio. También servía para proteger el fuerte del impacto directo de los disparos de artillería.

La longitud de los glacis generalmente se calculaba según la gama de las armas estándar que se usarían en la defensa de la fortaleza. En este caso, tiene unos 450 metros que es el alcance de las carabinas de artillería Martin-Henry que se usaban en el momento en que se construyó el fuerte. Puede ver ejemplares originales de estas armas en el museo que se encuentra en el interior del fuerte.